Se dio bajo el marco del cierre del electivo de Teatro. Este evento no solo fue una evaluación académica, sino también una oportunidad para demostrar el impacto del arte y la creatividad en la formación docente.
Por Camila Vásquez
La actividad de cierre de prácticas profesionales es parte de una tradición que el Programa de Regularización de Título para la Enseñanza Técnico Profesional ha realizado por años, en la que se incentiva al estudiantado a poner en práctica todos sus conocimientos, así como determinar cuáles son las fortalezas y las debilidades a las que se verán enfrentados durante el segundo semestre.
“Este es un hito significativo, y bajo ese contexto, destaco a la profesora Sonia Ávila, Inés Ávila, Carolina Véliz y a los profesores que se integraron este año y que, además, son ex alumnos del Programa, Bernardita Cortés y Jonathan Albornoz”, aseguró el coordinador académico del Programa, Benjamín Troncoso.
Bajo este contexto, el profesor se refirió a los resultados de aprendizaje obtenidos en las asignaturas, aspecto que les permite a las y los estudiantes alcanzar el desempeño integral.
“Tenemos cuatro competencias integrales, entonces todas las asignaturas y la malla curricular tributa a éstas, razón por la cual, a las prácticas se les da tanta importancia. Cada asignatura del programa aporta elementos para integrarlo en la práctica uno, dos y tres, por lo tanto, son un buen sensor que se complementa con evaluaciones y mediciones, aspecto que nos permite corregir y acortar las brechas que se pueden haber producido”, aseguró el profesor.
Un hito significativo
En esta sesión de cierre, a diferencia de los años anteriores donde se realizaba por separado, se decidió juntar a todos los cursos con el equipo de profesores y profesoras.
“En el caso de práctica uno, reflexionamos en torno a cómo se sentían respecto de la modalidad, en que, por primera vez, los acompañaríamos en en sus centros de práctica, algo completamente distinto para ellos. Respecto a la práctica dos, profundizamos el trabajo y el vínculo que la Universidad establece con los centros. En cuanto a la práctica tres, cerramos todo este largo proceso, recordando momentos y temas que trabajamos. Para nosotros es un privilegio acompañarlos, y este espacio fue muy importante para cumplir con ese objetivo”, aseguró la profesora Carolina Véliz.
Respecto a la actividad, complementó: “Nos tomamos un cafecito, nos reímos harto y fue una instancia muy bonita. Muchos de los estudiantes que estuvieron conmigo se acercaron y agradecieron la la dedicación, el acompañamiento y la preparación”.
Desde la perspectiva de las y los estudiantes, esta instancia fue muy relevante para dar cierre a un momento que ellos calificaron como fundamental.
Es el caso de Son Ien Ai Ostermann, estudiante de quinto semestre, quien destacó el simbolismo de la ceremonia, así como el apoyo y trabajo del equipo del programa.
“El regalo de la sal me recordó el impacto duradero que cada uno de nosotros puede tener en el aula, sazonando no solo los contenidos sino también la vida de nuestros estudiantes. Como bien dijo Paulo Freire, la educación es un acto de amor y compromiso, un proceso continuo de diálogo y transformación”, aseguró.
Para ella, esta etapa final no solo marcó el cierre de un ciclo, sino el comienzo de una carrera llena de promesas y desafíos.
“La asignatura de práctica, al integrar teoría y práctica, fue crucial para fortalecer nuestras habilidades docentes y brindarnos la confianza necesaria para ofrecer clases de excelencia. Estoy profundamente agradecida de todos los profesores de práctica, especialmente a Sonia Ávila, cuyo apoyo y orientación han sido fundamentales en mi desarrollo. Este cierre no solo ha consolidado mi rol como educadora, sino que también ha encendido en mí una pasión renovada para enfrentar el futuro con dedicación y entusiasmo para mejorar la educación de nuestro país”, dijo.
Para finalizar, reflexionó en torno a su decisión por estudiar en nuestra Unidad. “Desde el primer día en que decidí embarcarme en la carrera de Profesor de Estado en Educación Técnico Profesional, supe que este viaje estaría lleno de desafíos y aprendizajes profundos. Nuestro último día de clases estuvo marcado por la actividad de finalización de la asignatura de Prácticas y al mirar atrás y repasar los casi tres años de estudio y crecimiento, sentí una mezcla de orgullo y emoción al ver cómo mi curso se lleva esa vocación de educador y educadora y como florecimos lentamente”, concluyó.
Foto: Regalo simbólico
Foto: Estudiantes de la asignatura de prácticas profesionales
Foto: Actividad de cierre de prácticas profesionales
Foto: Actividad de cierre de prácticas profesionales
Se dio bajo el marco del cierre del electivo de Teatro. Este evento no solo fue una evaluación académica, sino también una oportunidad para demostrar el impacto del arte y la creatividad en la formación docente.