Académicos del Departamento de Educación analizan cambios en el currículum que saca a historia de los ramos obligatorios

La Dra. Paloma Miranda y el Dr. Jaime Retamal, profesores de Geografía y de Filosofía, respectivamente, exponen divergentes puntos de vista sobre esta modificación.
Por César Calquín
 
 

La Comisión Nacional de Educación (CNED), con el respaldo del ministerio de Educación, aprobó las modificaciones para que las asignaturas de Historia y Educación Física sean electivas. Un cambio en el currículum que se demoró más de lo esperado y que se aplicará en 2020 para los estudiantes de 3° y 4° medio.

Estos cambios contemplan que existan en el currículum seis ramos obligatorios que deberán ser impartidos por todos los colegios, sin distinción si es que son científico humanistas, comerciales, o artísticos. Los ramos en cuestión son: Lengua y Literatura, Matemática, Inglés, Educación Ciudadana, Filosofía, y Ciencias para la Ciudadanía.

Sin embargo, algo que causó polémica fue la exclusión de las materias obligatorias de Historia, que pasó a ser optativo, junto a otros ramos como Religión, Educación Física y Artes, las cuales tendrán dos horas semanales respectivamente.

Una buena propuesta de profundización

Al respecto, la académica del Departamento de Educación y Jefa de Carrera de Pedagogía en Educación Básica, Dra. Paloma Miranda, señala que conocía esta propuesta del currículum nacional desde hace unos años, sabía que Historia, Geografía y Ciencias Sociales llegarían hasta segundo medio y que luego existirían un conjunto de asignaturas optativas para los estudiantes, donde habría opciones que tuvieran que ver con el área.

Es por ello que está de acuerdo con la aprobación de esta medida y señala que “me parece una bonita propuesta, pensando en los estudiantes. Si pienso en los gremios, entiendo su posición, entiendo que los historiadores reaccionen, porque pareciera ser que hay menos historia en el currículum, o que los geógrafos reaccionen, que pareciera que hay menos geografía en el currículum, pero creo que también hay que pensar en los intereses y motivaciones de los estudiantes de hoy que se enfrentan a un mundo distinto”.

Además, profundiza en los contenidos planteados en esta reforma: “en términos de áreas (que plantea la reforma) son bonitas áreas y en términos de asignatura de profundización, me parecen buenas propuestas, que apuntan a la formación de una ciudadanía activa, para el mundo de hoy, que implica mayores niveles de alfabetización, alfabetización tecnológica y lingüística disciplinar en las áreas”.

También, manifiesta que esta reforma fue planteada a través de consulta pública a los actores principales, estudiantes y académicos: “Se les preguntó a los alumnos de educación media qué quieren aprender y los estudiantes respondieron algo muy cercano a esto. A los profesores, qué creían que era necesario que los estudiantes aprendieran en tercero y cuarto medio y los profesores respondieron algo cercano a esto, es decir, esto no es una propuesta que sale de la nada, como si fuera un ideario del gobierno de turno, esto es un proceso que se viene trabajando hace mucho tiempo, que ha tenido consulta pública y de las bases escolares, que, a mí parecer, son los más importantes”.

Además, la profesora Miranda señala que esta reforma trae al estudiante beneficios variados, entre ellos “es que el actual currículum está sobrecargado de disciplinas. Existen alumnos que tienen 12 asignaturas y pueden tener hasta seis en un mismo día, entonces, hay una reducción de disciplinas que me parece que es beneficioso para el aprendizaje del estudiante”.

“Creo que esto se vincula con los intereses propios de las nuevas generaciones, con las necesidades que vemos hoy. Esta nueva propuesta apunta a la alfabetización científica y la comprensión lectora. Por ejemplo, aparecen asignaturas como lectura y escritura especializada, participación y argumentación en democracia, que me parecen son buenas propuestas”, complementó la académica.

Otro de los beneficios que señala la Jefa de Carrera es que “ofrece un campo de formación, que es un campo de profundización, que complementan las asignaturas troncales. Es por ello que profundizar en áreas de interés personales me parece que es un tremendo avance”. 

“Un currículum sin memoria es un currículum sin futuro”

En contrapartida, el académico experto en Política Pública Educacional, Dr. Jaime Retamal, no está de acuerdo con esta reforma e indica, en el sitio web de Ahora Noticias, que "se pierdan esas horas obligatorias de una u otra manera va a ir en detrimento de un contenido tan importante como lo es la Historia y la Geografía, sobre todo para un país que necesita tener mucha más claridad respecto a esos temas".

“Hay un error en el cual estamos cayendo hace mucho rato: estamos pensando que los estudiantes tienen que prepararse para el siglo 21, cuando el 1 de enero 1951 el problema va a ser el siglo 22 porque vamos a estar ad portas de este siglo, es decir, nuestros nietos van a ser habitantes del siglo 22 y educarlos para el siglo 21 me parece una irresponsabilidad y es caer en la propaganda de las habilidades para el siglo 21”, señala Retamal.

Y agrega: “pensar el futuro significa pensarlo en serio y no simplemente pensar cuáles son esas habilidades profesionales que va a ayudarte a desenvolverte profesionalmente en el siglo 21. Pensar en el futuro significa pensar en cómo transformamos el futuro de tal manera que lo humanizamos y lo hacemos más sociable para cada uno de nosotros”.

En su participación en el programa Mentiras Verdaderas, de La Red, el Dr. Retamal fue enfático en señalar que este es un tema crítico, ya que una cultura sin memoria es la barbarie, una sociedad sin memoria es la barbarie misma y agregó que “de primero básico a segundo medio es muy poco tiempo para tanto contenido en historia. Sacar de 3ro y 4to medio la obligatoriedad de historia es un atentado contra la memoria de nosotros mismos”.

Además, sobre la posible flexibilización que generaría este nuevo currículum, Retamal señala que “discrepo de esta flexibilidad y libertad curricular porque hay cosas que no debieran ser elegibles. Por ejemplo, esto de ‘yo elijo vivir sano’ es un absurdo, es obligación vivir sano y educación física es una asignatura que nos va a evitar esos kilos mortales y nos puede llevar a una catástrofe como sociedad. Por lo tanto, me parece que hay que conjugar, por un lado, aquello que nos parece obligatorio y aquello que nos parece flexible. Me parece que Educación Física y lo que tiene que ver con el desarrollo y comprensión y conocimiento del cuerpo, es una disciplina absolutamente obligatoria”.

Para tener una buena síntesis hay que poner un buen peso en las humanidades, un buen peso en las ciencias, y el resto del tiempo dejarlo para que los estudiantes puedan elegir flexiblemente para que los estudiantes puedan elegir en qué quieren profundizar”, cerró Retamal.

 

Fecha de Noticia: 
Miércoles, Mayo 29, 2019